Cajas para guardar la torpeza

¡Ojalá pudiera borrar de un plumazo esa sensación en ti! 

Ojalá existiera una píldora mágica como si fueras Alicia en el País de las Maravillas o Neo de Matrix que hiciera desaparecer una realidad que no te gusta. 

Ojalá pudieras verte como yo te veo, nunca diría que eres inútil o torpe, nunca.

Yo no puedo borrar esas emociones de ti pero la buena noticia es que tú si puedes y no es cuestión de tomarte una pastilla mágica, es más te pediría que no lo hicieras, al menos sin haber intentado mi Técnica de las Cajas.

Todos tenemos facetas de nuestra vida en las que somos buenos y otras en las que no siendo una habilidad innata podemos mejorar muchísimo con la práctica, luego hay otro área más en la que definitivamente no somos hábiles pero podemos encontrar un nivel bajo pero al menos eficaz de seguir. Y ya si quieres podemos tener la última faceta que es la de “a la basura” por no decir “a la p. mierda”.

Por ahora, esa última la voy a olvidar de forma consciente porque ahí no debería haber nada, salvo que de forma clara lo hayas descartado y aún así, te diré que lo sigas intentando.

Si estás leyendo este artículo o haciendo el videotapping es porque hay ahora mismo algo que te trae por la calle de la amargura y te hace sentir torpe e inútil:

Una asignatura, o el curso entero, que se te resiste. Una tarea informática. Un tipo de ejercicio.

Para no divagar, te voy a hablar de mis retos y mis habilidades:

Se me da muy bien tanto que trato de hacerlo lo más posible: escribir, bailar, inventar cosas divertidas, ayudar a los demás a encontrar respuestas, estudiar, conducir.

Se me da bien porque he practicado mucho: meditar, deportes varios, mi autoestima, hablar en público.

Lo hago, sin más: redes sociales, la tecnología, escribir sobre estadísticas y temas económicos, el papeleo, ordenar, cocinar.

Definitivamente no es lo mío y decido que no lo hago: diseño web, contabilidad, costura, manualidades, el running, las tertulias de sociedad.

Son cuatro categorías, aunque a ti te parezca que la primera es más importante en realidad todas tienen su sentido y la clave está en llegar a un equilibrio con todas ellas. Así ni creerás que eres el amo del mundo con un Ego descomunal (y nunca te sentirás emocionado por las novedades y la gente saldrá huyendo cuando te vea); ni te sentirás la persona más torpe del mundo (un nerd vamos) que ni saldrás de casa.

Se trata de ir buscando aquello que se te dar bien y potenciarlo. Te sorprenderías de cómo cosas que a ti te pueden parecer absurdas para otros son valores por los que pagarían. Marie Kondo es famosa por ordenar armarios; mi vecino de 16 años es capaz de maquetar ordenadores a todo el barrio y tuvo que esforzarse tremendamente para aprobar sus estudios primarios; el gusto de una gran amiga mía por la decoración la ha llevado a crear un club de restauradores que recibe subvenciones por enseñar esta habilidad a otros. Una de mis primas pequeñas sufrió lo indecible para superar el bachillerato pero una vez que encontró aquello que quería ¡¡tiene dos licenciaturas y un doctorado!!!.

Igual no sabes quién es Eckhart Tolle, pero seguro que has oído hablar sobre la importancia de vivir “en el aquí y el ahora”, pues este famoso autor escribió su primer bestseller después de estar dos años en un parque sentado simplemente mirando pasar la vida, y esa es la base de su filosofía. Y qué me dices del actor Adam Richman, el protagonista de Crónicas Carnívoras, ¡¡¡vivir de comer como un cerdo!!! hay cosas que para unos son absurdas y para otros son sumamente valiosas. Esa es la lección de hoy.

¿Y tú qué sabes hacer?

Aquí comparto contigo mi Teoría de las Cajas para superar la sensación de torpeza. Yo tengo cuatro cajas y tú a partir de ahora también. 

¿Qué haces cuando disfrutas?: Maquillar, peinar, explicar cosas con facilidad, arreglar aparatos, adiestrar animales, bailar reggaeton…  Solo si te diviertes haciéndolo puedes ponerlo en la Caja 1 y potenciarlo.

¿Qué es aquello que querrías hacer pero crees que no se te da bien? A la Caja 2. Hay que dedicarle mucha práctica, tú y todos.

¿Qué es aquello que no te gusta pero lo necesitas en tu vida? A la Caja 3. Lo haces porque es importante para ti pero como no te gusta, no es algo que debas potenciar. Solo trabajar y aprender lo justo. Si puedes contrata, o intercambia ese trabajo, con otros.

Y antes de meter en la Caja 4 una o algunas actividades, antes debes haber tratado de que por lo menos esté en la Caja tres. Solo entonces podrás meter ahí aquello que realmente odias… pero te aseguro que aunque odio el running, porque hasta ahora no he podido pasar de 20 minutos corriendo, todos los años en verano vuelvo a intentar superar mi meta.

Los que lleváis años siguiéndome ya sabéis que soy muy práctica, así que vamos al ejercicio de tapping para trabajar estas emociones tan paralizantes.

https://www.youtube.com/watch?v=mvkRyYS9FKA

Vuelve y me cuentas tu impresión.

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